Pequeñas pero grandes diferencias....

06 de Septiembre del 2007

Eran aproximadamente las 11:43 cuando entre a la sala y me senté en el banco, era para zurdos y a pesar de que estoy acostumbrado a usar las de diestros (que la razón de estas en salas es como 15:1 con respecto a las de zurdos) decidí que sería un buen lugar para rendir el certamen. Recién a las 11:55 entró al aula la profesora siendo que la prueba era a las 11:45. Nervioso, expectante, me sentía tranquilo pero algo ansioso, me sudaban las manos de una manera increíble (si, tengo ese problema no sé cual es el nombre) y comencé por sacar mis lápices y goma para rendir el dicho test. La docente comenzó a entregar los certámenes, fui uno de los primeros en recibirlo. Al examinar a la rápida no se veía tan complicada, eran ejercicios que había realizado de alguna u otra manera, similares. Saqué el cuadernillo para escribir mi nombre, después de haberlo hecho leí la primera pregunta y comencé por entenderla. Cuando me decidí a responder me di cuenta de que el portaminas estaba vacío, fue ahí cuando noté cuan nervioso estaba...saque las minas de repuesto y cuando estuve dispuesto a reponerla, me temblaba tanto la mano que la mina se quebró a medio entrar, saque otra y logre reponerla apoyando la mano con el pupitre, ese fue el inicio de la catástrofe…

Nota: 1,3

07 de Abril del 2008

Llegue a la sala cercano a las 08:14, el profesor ya se encontraba en ella y estaba distribuyendo puestos para rendir el certamen. Me senté relativamente adelante y saqué mis lápices y la goma. Él entrego los certámenes justo después de terminar de ordenar a algunos alumnos que estaban desalineados respecto a las filas que se utilizan para rendir este tipo de pruebas. Revise raudamente las preguntas y no se veían difíciles, pero algo importante de mencionar es que antes de llegar a la universidad estaba nervioso, pero tranquilo a la vez, porque sentía que no había estudiado mucho, pero si lo había hecho, también pensaba “que pasa si sucede algo mal y no logro lo que quiero”. Sin embargo deseche rápidamente esos pensamientos tranquilizándome de que conocía la materia mucho mejor que el semestre pasado, entendía las cosas al revés y al derecho, habíamos revisado en clases los ejercicios de cada materia, aparte de mis horas de estudio y dedicación que también ayudaron a desechar dichas cavilaciones. Saque el cuadernillo y comencé a escribir mi nombre, después de eso anote el numero de la primera pregunta y con el portaminas empecé a responder…nervios? No…sentí tranquilidad.

Nota: 5,8

Como se nota la diferencia entre un docente y otro, que lástima…